Reviva la memoria adormecida
de aquel árbol solitario, volver
nunca pudieron, aves blancas
ver las ramas caducarse envejecidas.
De frondoso linaje parecía
hasta polvo convertirse, sed
de sueños escondidos en su tez
impenetrable, raices dormidas.
Meandros divagantes en su alma
trazando dirección en su camino,
eternidad que el arropa de nostalgia.
Hojas que su halo ya han perdido
minutos que arrepentidos se arrastran
por la costa inquebrantable del olvido.
de aquel árbol solitario, volver
nunca pudieron, aves blancas
ver las ramas caducarse envejecidas.
De frondoso linaje parecía
hasta polvo convertirse, sed
de sueños escondidos en su tez
impenetrable, raices dormidas.
Meandros divagantes en su alma
trazando dirección en su camino,
eternidad que el arropa de nostalgia.
Hojas que su halo ya han perdido
minutos que arrepentidos se arrastran
por la costa inquebrantable del olvido.
Escribo desde la patria natal de Consuelo Burell y su padre, Don Julio Burell. ¿Dónde puedo obtener información sobre los promotores de este premio y sobre la trayectoria del concurso y demás matices? Nos interesa muchísimo para reconstruir la biografía de esta ilustre maestra, tan ilustre como su padre, don Julio Burell. Saludos y mi agradecimiento de antemano, Prof. Dr. M. Galeote
ResponderEliminarHola Laura!, preciosas poesías, me han gustado mucho. Besos
ResponderEliminarEs un premio a Nivel provincial para alumnos de ESO y Bachillerato que organiza el IES Francisco Giner de los Ríos, de Segovia.
ResponderEliminarEl concurso recibe ese nombre debido a que Consuelo Burell donó toda su biblioteca al instituto al morir
estudio en ese instituto y mi padre es profesor allí también. Para cualquier cosa escribeme a laurix993@hotmail.com
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